“ES MARAVILLOSO VER TRABAJAR A DI CAPRIO”

Fue justamente la historia de un grupo de chicos que quedan recluidos en una casa de campo, enfrentados a su inocencia y a su crueldad incipiente, el filme que generó el encuentro entre Murga y Scorsese, cuando el director de “Taxi driver” buscaba una protegida para cumplir su rol de maestro en el programa de ayuda a artistas emergentes que auspicia la marca de relojes. De tres preseleccionados, fue una entrevista con el realizador norteamericano la que selló el triunfo de la trasandina. “Me dijo que le gustó mucho ‘Una semana solos’. Tanto que ¡me ofreció poner su nombre presentándola en el inicio del filme! Me dijo que tengo una manera de narrar muy particular, no directa, que veo las cosas desde un ángulo diferente”, cuenta con entusiasmo.

Desde ese momento hasta ahora se han reunido unas seis veces. Al principio, en el set de “Shutter Island” y luego en Nueva York, donde la directora pudo asistir a la sala de montaje y de mezcla de sonido. Además él está leyendo su próximo guión: “La tercera orilla del río”, una cinta que habla sobre el vínculo afectivo que tiene un joven de 16 años con su padre. “Es una relación conflictiva, donde hay amor pero también violencia e incomprensión. Me interesa mucho indagar en esa complejidad”, sostiene la argentina. “Hemos charlado harto con Scorsese sobre éste. Y él tiene una manera de ver a los personajes muy empática… Es claramente un maestro de la narración clásica y como el tipo de cine que hago yo es muy diferente al suyo (mis películas se cuentan a través de los personajes, de los climas, de lo que no se dice), su aporte se ha vuelto aun muy valioso”, cuenta la mujer que absorbe como una esponjita los consejos que el genio de “After hour” le dará durante un año. “La experiencia con Scorsese ha sido increíble, porque además es alguien que admiro mucho desde mis años de estudiante. Verlo trabajar con DiCaprio también ha sido impresionante porque se conocen mucho. Hay una gran confianza y él es un actor increíble. Es maravilloso verlo trabajar. La entrega que le pone al trabajo, siempre pidió hacer una toma más, para agregar y probar alguna cosa a su actuación”, recuerda quien conoce también algunos directores chilenos. “He compartido con Alicia Scherson, Marcela Said y Andrés Waissbluth y los tres tienen formas muy personales de narrar, eso me parece muy importante para la cinematografía de un país”, comenta.